sábado, 4 de julio de 2009

Tijuana 2005 - Cómo te voy a olvidar?

Tip: http://www.youtube.com/watch?v=eeiZif1uXU8
Al finalizar de leer, podés escuchar el tema.

COMO TE VOY A OLVIDAR


Como tantas veces, salgo corriendo y espero espero espero un taxi libre. Sí, taxi libre: esos blancos con una banda roja que nunca se sabe cuánto cobran y qué cara tendrá el conductor, con qué saldrá al escuchar mi acento. Esa tarde no tenía ganas de hablar. Sólo dije “Boulevard las Américas y Aguas Calientes” y nunca logré entender por qué, sólo con esa frase,…….. siempre me decían “argentina?”. Yo evitaba el uso de la “ye”, pero se daban cuenta todos. Venían las preguntas de rigor: “le va al Boca o al River?”, “le gusta Maradona?”. No hay otro tema para tocar con un argentino (argentina) que no sea el fútbol???

Y pensaba todo eso junto mientras paraba un taxi. Que no me dé charla que no me dé charla porque, por otro lado, empezaban las mentiras. No, no estoy sola. Ah, cuántos hijos tiene? Y su marido qué hace? Ud. parece gabacha………… porque cualquier mentira era válida para que no supieran que yo, en Tijuana, estaba y vivía sola. La integridad ante todo. Bajarme en la esquina para que no me vieran entrar, esquivar respuestas porque nadie para de preguntar frente a un acento extranjero y tipo físico distinto.

Pero dije mi destino y el chofer, un hombre de edad indescifrable como la mayoría allí, algo canoso, bien moreno, arrugas profundas y piel seca de años de desierto me dice: “Escuche qué rola!” y sube tanto el volumen de la radio que dejé de escucharlo. La rola o la canción era cantada por el grupo “Los Ángeles Azules”- me asesoró y regañó con: “Escuche”. A mí me parecía una cumbia tropical o algo así. Yo no entendía nada. En medio de una avenida, escuchando una canción con ritmo norteño (después supe qué era) y conducida por un hombre que levitaba conmovido al escuchar esta canción. Yo no entendía ni de qué hablaba la letra. Tuve que obedecer y escuchar.

El amor de la madre es el más grande de los amores,
Como es ninguno
Cuando uno tiene la dicha,de tenerla en vida.

De poderla abrazar y besar,
De poder estar con ella es una gran felicidad
Son momentos imborrables,
En mi vida.

Inolvidables de mi corazón,
Inolvidables de mi corazón.

Cuando uno ya no la tiene,
Se arrepiente de muchas cosas
Ya nada lo puede remediar,
Pero ya nada lo puede remediar.

Tengo un remordimiento total,
Aquí dentro de mi ser
de las caricias que tenían mis padres,
Y en su momento no los ayude.

Pedían un calor de unos hijos,
Y no llegaba a publicar
Y el que tiene ese amor de amores...

Lo debe de querer...
Hoy!
Adorar...
Hoy!
Amar en vida...
Hoy!

Tengo un remordimiento total,
Aquí dentro de mi ser
de las caricias que tenían mis padres,
Y en su momento no los ayudé.

Pedían un calor de unos hijos,
Y no llegaba a publicar
Y el que tiene ese amor de amores...

Lo debe de querer...
Hoy!
Adorar...
Hoy!
Amar en vida...
Hoy!

Hoy es el momento de llevarle flores,
No cuando ya no viva,
Hoy es momento de abrazar y besar

A ese amor de amores,
A ese amor de madres,
A ese amor de madre,

Nunca existirá,
Nada que se le parezca


Y este hombre nunca imaginó cómo se abarrotaban los recuerdos en mi cabeza. Será posible! Tan lejos de todo, mi madre, mi casa, mi gente………a todos ellos quería honrarlos con flores, las más lindas que vi en mi vida están en México, y no podía dejar de pensar y abrí la ventanilla un poco. Aire de Santana, caliente y sucio, sobre mi cara. Anteojos de sol y menos mal que no me ve porque yo ya veo todo turbio y parezco silenciosa pero se me cerró la garganta. Y ese lugar, con tapizado color leopardo y lleno de adornos y brillos se transformó en una cápsula…. Y mi taxista, este ángel que hoy me tocó, entró en trance y no podía de dejar de hablar.

Me vine, sabe, soy de Yucatán. Mi jefa sufrió mucho, mi papá nos dejó, bebía un poco y ella luchó para guiarnos con la ayuda de la Virgencita de Guadalupe. Yo pensé, Dios primero, venirme y chambear mucho, algún día juntar la lana para cruzar “del otro lado” y ganar una buena feria para mandarles siempre. Mi mamacita nos enseñó todo. Mientras decía esto, levantaba las manos del volante y se apasionaba. Cuando me echo un taquito, me acuerdo de ella. Ponía la mano como si fuera a echarse agua para tomar mientras con la otra mostraba que agregaba cosas y decía: tomo así la tortilla y pongo la carne asada y el cilantro y un poquito de aguacate. Seguía con la mímica. Y así, como ella nos acostumbró. Y pienso cómo me echaría este taquito con mi jefecita y una agüita de horchata o de jamaica hecha por ella misma. Pero estoy acá, nunca pude volver, llevo 30 años.

La música norteña seguía. Yo escuchaba algo, también seguía con mis flashes mentales intermitentes. Cuántos recuerdos juntos y recién es el mediodía. Cómo sigo hoy? Me atormentaba esa pregunta. Yo seguía así confundida, conmovida, sentada detrás cuando vi que con esa misma mano que echaba los ingredientes a su taquito soñado, se limpiaba los ojos. Sobre esos surcos secos como la tierra norteña había empezado a llover. Y nos unimos en algo universal: los recuerdos, los sueños y los verdaderos amores.

Llegamos! Disculpe todo lo que hablamos señorita, es que mi viejita es todo y no le cumplí. Gracias, está bien. Qué Dios me la bendiga y tenga un buen día.

Y a vos también, amigo taxista. Por eso te dedico esta canción de tu grupo preferido. Aquí va “Cómo te voy a olvidar”, Los Ángeles Azules. Sé que es de amor pero el título es lo que motiva esta dedicatoria.


Como te voy a olvidar
Ángeles azules

Amor, amor, amor
amor, amor, amor
quiero que me vuelvan a mirar tus ojos
amor, amor, amor
amor, amor, amor
quiero volver a besar tus labios rojos
cómo no acordarme de ti
de qué manera olvidarte
si todo me recuerda a ti
si en todas partes estás tú.

Si en una rosa estás tú
si en cada respirar estás
cómo te voy a olvidar
cómo te voy a olvidar
si besando la cruz estás tú
rezando una oración estás tú
cómo te voy a olvidar
cómo te voy a olvidar
Si te clavaste aquí en mi corazón
y de amor, has llenado mi alma
y tu sangre corre por mis venas
y mi sangre me hace estremecer
yo contigo.

Amor, amor, amor
amor, amor, amor
quiero que me vuelvan a mirar tus ojos
amor, amor, amor
amor, amor, amor
quiero volver a besar tus labios rojos
cómo no acordarme de ti
de que manera olvidarte
si todo me recuerda a ti
si en todas partes estás tú.

Si en una rosa estás tú
si en cada respirar estás
cómo te voy a olvidar
cómo te voy a olvidar
si besando la cruz estás tú
rezando una oración estás tú
cómo te voy a olvidar
cómo te voy a olvidar.

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